El presidente de Venezuela Hugo Chávez propuso la creación de una “radio popular” que operaría en las frecuencias de unas 240 emisoras, que según él funcionan “ilegalmente” y cuyas licencias serán restituidas al Estado.
Está previsto que a los concesionarios de estas frecuencias radiales les sea abierto un proceso administrativo por no haber actualizado sus datos en el plazo estipulado por la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel).
“Estas emisoras, centenares de ellas, están trabajando ilegalmente, y no son pequeñas, la mayoría son circuitos radiales de alcance nacional que no tienen permiso”, sostuvo el mandatario en un acto retransmitido por televisión.
“Al que no tenga permiso, al que esté violando la ley, (le decimos que) nosotros vamos a recuperar el espectro radioléctrico para ponerlo a la orden del país, a la orden del pueblo”, agregó.
El mandatario explicó que con las emisoras que recuperen se creará “una radio popular en manos del pueblo”.
“Si recuperamos esas emisoras, no es para dárselas a la burguesía”, agregó, en medio de aplausos.
La revocatoria de estas licencias forma parte de lo que el gobierno ha llamado la “lucha contra el latifundio mediático”, que incluye además una propuesta al Parlamento, controlado por el oficialismo, para que limite por ley la conformación de los circuitos radiales, es decir, de las asociaciones de emisoras locales que trabajan en conjunto para transmitir a todo el país.
Según el gobierno, esta medida impulsará la producción de espacios radiales locales y “democratizará el espectro radioléctrico”.
Para la Cámara de la radio de Venezuela, la “recuperación” de estas 240 emisoras es “un atropello gigante” de parte del gobierno de Chávez.
La Cámara Venezolana de la Radiodifusión dijo que la “amenaza” gubernamental de “cierre” de las 240 emisoras, que constituyen cerca del 40 por ciento de las que operan en el país, constituye una “violación” a las leyes locales y tratados internacionales que amparan las libertades de expresión e información.
La Cámara ha repudiado por “repentina” y “desproporcionada” la medida, que, ha añadido, “carece de fundamento” porque las emisoras de radio miembros de la Cámara “han cumplido todos los trámites exigidos por la Conatel a partir del año 2000, para adecuarse a la Ley Orgánica de Telecomunicaciones”.
Sectores políticos de oposición han afirmado que con las medidas contra las radios privadas el gobierno “revolucionario” supuestamente pretende acallar a la disidencia.
Chávez respaldó así la iniciativa del ministro de Obras Públicas, Diosdado Cabello, de iniciar procesos administrativos a unas 240 emisoras de radio que no actualizaron sus datos ante la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) el pasado junio.
“Estas emisoras, centenares de ellas, están trabajando ilegalmente, y no son pequeñas, la mayoría son circuitos radiales de alcance nacional que no tienen permiso”, sostuvo el mandatario en un acto retransmitido por televisión.
“Al que no tenga permiso, al que esté violando la ley, (le decimos que) nosotros vamos a recuperar el espectro radioléctrico para ponerlo a la orden del país, a la orden del pueblo”, agregó.
El mandatario explicó que con las emisoras que recuperen se creará “una radio popular en manos del pueblo”.
“Si recuperamos esas emisoras, no es para dárselas a la burguesía”, agregó, en medio de aplausos.
La revocatoria de estas licencias forma parte de lo que el gobierno ha llamado la “lucha contra el latifundio mediático”, que incluye además una propuesta al Parlamento, controlado por el oficialismo, para que limite por ley la conformación de los circuitos radiales, es decir, de las asociaciones de emisoras locales que trabajan en conjunto para transmitir a todo el país.
Según el gobierno, esta medida impulsará la producción de espacios radiales locales y “democratizará el espectro radioléctrico”.
Para la Cámara de la radio de Venezuela, la “recuperación” de estas 240 emisoras es “un atropello gigante” de parte del gobierno de Chávez.
La Cámara Venezolana de la Radiodifusión dijo que la “amenaza” gubernamental de “cierre” de las 240 emisoras, que constituyen cerca del 40 por ciento de las que operan en el país, constituye una “violación” a las leyes locales y tratados internacionales que amparan las libertades de expresión e información.
La Cámara ha repudiado por “repentina” y “desproporcionada” la medida, que, ha añadido, “carece de fundamento” porque las emisoras de radio miembros de la Cámara “han cumplido todos los trámites exigidos por la Conatel a partir del año 2000, para adecuarse a la Ley Orgánica de Telecomunicaciones”.
Sectores políticos de oposición han afirmado que con las medidas contra las radios privadas el gobierno “revolucionario” supuestamente pretende acallar a la disidencia.
Chávez respaldó así la iniciativa del ministro de Obras Públicas, Diosdado Cabello, de iniciar procesos administrativos a unas 240 emisoras de radio que no actualizaron sus datos ante la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) el pasado junio.
(LaTribuna)
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