Puerto Rico; 16/04/2012.-La última vez que el programador Pedro Arroyo entró a la cabina de la emisora Z-93 fue el pasado viernes para presentar un adelanto del disco Eba say ajá de Rubén Blades y Cheo Feliciano.
No era su costumbre hablar ante los micrófonos, pero este trabajo musical fue especial para el creador del Día Nacional de la Zalsa. Desde que Rubén Blades y Cheo Feliciano iniciaron la grabación de este álbum hace siete años, Arroyo estuvo con ellos apoyándolos. Llegó a estar presente en la grabación del disco y se mantuvo pendiente al proyecto durante todo este tiempo de espera.
El pasado jueves, Ariel Rivas, manejador de Rubén Blades, lo llamó para decirle que el master del disco ya estaba listo. Pedro Arroyo le preguntó si podía emitir un adelanto del trabajo y Rivas le dijo que tendría la primicia con el tema Lo bueno ya viene. La canción le encantó al programador, quien la llegó a tocar en cuatro ocasiones, según le comunicó a Rivas a través de un mensaje de texto. Arroyo también transmitió varios segundos de los 12 temas que componen este disco en el que Rubén Blades canta algunos éxitos de Cheo Feliciano y a la inversa, y en el que también se incluyen duetos entre ambos artistas.
“Quedó espectacular. Hice lo que te dije con cada canción. La gente llamó, algunos hasta llorando por lo que escucharon”, le escribió Arroyo a Rivas.
Si hoy de tu lado se va tal vez una ilusión, mañana llamará a tu puerta el verdadero amor. Siempre viene una rayito de luz a borrar las tinieblas, tras la lluvia verás salir el Sol. Si el destino te hizo probar lo malo de la vida, verás que pronto lo bueno probarás.
El inicio de la letra de Lo bueno ya viene, cantando a dúo por Cheo Feliciano y Rubén Blades, sirve hoy como una especie de despedida de Arroyo a sus familiares, amigos y seguidores que todavía no salen del asombro ante la inesperada muerte del programador.
“Este proyecto era muy grande para él porque fue parte del proyecto desde que lo iniciamos hace siete años. Estuvo en la preparación del disco y conoció toda la mecánica de la producción. Faltaba un mes para la presentación del disco (lo lanzan el 29 de mayo), pero dijo que no aguantaba más y que quería presentarlo ya y lo hizo dos días antes de su muerte”, detalló ayer Cheo Feliciano en entrevista telefónica con Primera Hora.
No era su costumbre hablar ante los micrófonos, pero este trabajo musical fue especial para el creador del Día Nacional de la Zalsa. Desde que Rubén Blades y Cheo Feliciano iniciaron la grabación de este álbum hace siete años, Arroyo estuvo con ellos apoyándolos. Llegó a estar presente en la grabación del disco y se mantuvo pendiente al proyecto durante todo este tiempo de espera.
El pasado jueves, Ariel Rivas, manejador de Rubén Blades, lo llamó para decirle que el master del disco ya estaba listo. Pedro Arroyo le preguntó si podía emitir un adelanto del trabajo y Rivas le dijo que tendría la primicia con el tema Lo bueno ya viene. La canción le encantó al programador, quien la llegó a tocar en cuatro ocasiones, según le comunicó a Rivas a través de un mensaje de texto. Arroyo también transmitió varios segundos de los 12 temas que componen este disco en el que Rubén Blades canta algunos éxitos de Cheo Feliciano y a la inversa, y en el que también se incluyen duetos entre ambos artistas.
“Quedó espectacular. Hice lo que te dije con cada canción. La gente llamó, algunos hasta llorando por lo que escucharon”, le escribió Arroyo a Rivas.
Si hoy de tu lado se va tal vez una ilusión, mañana llamará a tu puerta el verdadero amor. Siempre viene una rayito de luz a borrar las tinieblas, tras la lluvia verás salir el Sol. Si el destino te hizo probar lo malo de la vida, verás que pronto lo bueno probarás.
El inicio de la letra de Lo bueno ya viene, cantando a dúo por Cheo Feliciano y Rubén Blades, sirve hoy como una especie de despedida de Arroyo a sus familiares, amigos y seguidores que todavía no salen del asombro ante la inesperada muerte del programador.
“Este proyecto era muy grande para él porque fue parte del proyecto desde que lo iniciamos hace siete años. Estuvo en la preparación del disco y conoció toda la mecánica de la producción. Faltaba un mes para la presentación del disco (lo lanzan el 29 de mayo), pero dijo que no aguantaba más y que quería presentarlo ya y lo hizo dos días antes de su muerte”, detalló ayer Cheo Feliciano en entrevista telefónica con Primera Hora.
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