RADIO EN EL VERANO

Argentina; 28/01/2009-

En las parejas, cuando uno se va de viaje, el otro tiene dos posibilidades: acompañarlo o quedarse. Si se queda, puede ser porque no tiene los recursos para sumarse o porque prefiere dejar ir al otro y comunicarse cada tanto para ver cómo está. Si se va, las vivencias son compartidas y eso, se supone, enriquece la relación.

Algo similar ocurre con la radio y sus oyentes, quienes disfrutan durante todo el año un vínculo de cercanía, que, cuando llega el verano puede empobrecerse, mantenerse o afianzarse. Todo de acuerdo a cómo se maneje la bendita distancia.

Radio Rivadavia está entre las emisoras que buscan fortalecer su relación con la gente. Por eso, como desde hace 25 años, Ricardo Guazzardi —uno de sus referentes— volvió a transmitir esta temporada desde Mar del Plata. Esta vez con El sillón de Rivadavia (AM 630, se emite de lunes a viernes de 14 a 17), desde el balneario 12 de Punta Mogotes, el conductor pretende "pintar el verano en todos sus colores", con móviles que cubren sólo lo que pasa en el país porque Guazzardi se confiesa un defensor del turismo argentino.

Los veraneantes descansan y los que pueden cansarse son quienes los acompañan: "No estoy relajado —afirma el locutor de Rivadavia—. Durante el año el programa lo hago de taquito, pero acá se genera mucha adrenalina porque implica el doble de esfuerzo y de tensión".

Para ilustrarlo, el periodista cuenta que mientras que en la emisora de la calle Arenales todo el equipo técnico lo acompaña, cuando transmite desde Mar del Plata sus colaboradores se comunican con él desde Buenos Aires vía la llamada "línea de orden" —que escucha únicamente él desde un auricular—, mientras que en su otro oído otro auricular reproduce lo que transmite la radio. Así, el conductor padece una suerte de esquizofrenia constante que dura todo el programa, y por la que, cuando finaliza, se necesitan "por lo menos quince minutos para recuperarse", según sus propias palabras.

Apenas unos kilómetros más cerca de Buenos Aires, Juan Alberto Badía, el conductor que lleva 18 años en Pinamar y uno de los precursores de la movida radial desde la Costa Atlántica (ver Badía hizo punta en Pinamar), coincide: "Hacer radio de cara a la gente es muy simpático, pero hay que saber hacerlo. Hay que trabajar con lo que se está diciendo y también con lo que la gente cuenta en persona, con los que vienen a preguntarte cuál es el mejor hotel o a quejarse por la mala recolección de la basura".

Desde hace años, en cada temporada, la coyuntura del veraneante suele ser el tópico recurrente de los ciclos radiales montados a orilla del mar.

La tensión que reconocen estos conductores, sin embargo, no sólo iza bandera roja. La tela se tiñe de otros colores con algún paseo cerca del mar, después de trabajar; con la buena predisposición de los oyentes y del equipo de trabajo, que todos resaltan; y con la fantástica vista que se tiene desde los estudios: "Ver chicas en bikini, gente haciendo deportes o tirándose a la pileta te aporta otra frescura, que transmitís a la gente", asegura Sebastián Uslenghi, el conductor de After Beach, 40 principales, por Los 40 principales (FM 101.1, Mar del Plata). Desde Arenas Blancas, el parador que tiene la radio, el conductor se relaja: "Estoy cero con las noticias; a veces ni digo la temperatura. Sólo cuento que el día está lindo o que el mar está muy picado". Aunque no todos están "cero con las noticias", la mayoría de los programas que se transmiten desde la Costa priorizan la interacción lúdica con los oyentes a las informaciones sobre política o actualidad a nivel nacional, que tampoco faltan.

Otra es la situación de las emisoras que se quedan en Buenos Aires. Mitre (AM 790), Del Plata (AM 1030), Radio 10 (AM 710), Vale 97.5, Mega 98.3, Pop Radio (FM 101.5), Aspen (FM 102.3) y La 100 (FM 99.9) mantuvieron sus programas habituales —con la ausencia lógica de algunos conductores por vacaciones— o adelantaron la programación del año (como La 100, donde Roberto Pettinato —va de lunes a viernes de 6 a 9—, y Lalo Mir y Maju Lozano —lunes a viernes de 9 a 13— comenzaron su ciclo 2009 el pasado lunes 19).

Si bien en muchos casos se cuenta con móviles desde los lugares de veraneo y reina un clima más distendido que en el resto del año, los conductores no admiten mayores diferencias con los contenidos del resto del año. Así lo reconoce Diego Della Sala, de Day Puntin (una versión de Day Tripper, de Rock & Pop, que muta su nombre cada enero): "En verano hay menos gente, el que hace la radio se da más tiempo y baja el nivel de adrenalina. Además, el oyente también es más pasivo, no quiere tanto bombardeo".

Su emisora, junto con La Metro, son locales todo el año en Mar del Plata, a través de Rock & Pop Beach (FM 98.9) y Metro Mar del Plata (FM 95.3) —además, Metro también está en Pinamar—. Y desde hace tres años comparten durante el verano el parador Arenabeach" en las playas del sur de La feliz, donde los Dj's de Metro pasan música y en el que Rock & Pop solía organizar recitales. "Hacemos lo que la realidad nos permite. Las marcas están en un 50% o menos. Pero esto es una crisis que excede la Argentina", reconoce Analía Tievoli, gerente de Marketing de la División Medios de CIE. Desde Radio Disney, el gerente general, Marcelo Morano, a propósito de la radio en Pinamar (FM 106.7), coincide: "Todos estamos bajo el efecto susto.

Nosotros sin embargo decidimos hacer la misma inversión que el año pasado, aunque las ganancias no sean las mismas, porque tenemos una visión de marca que excede el negocio".

El amor es así: mientras se pueda, los proyectos son compartidos. Y cuando no se puede vivir del amor, se hace lo que se puede, que no es poco.-

(clarin.com)